Son varias las razones por las cuales Ashotel; la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT); la Asociación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Fuerteventura (AEHTF); y la Asociación Insular de Hoteles y Apartamentos de Lanzarote, Asolan, se han unido para hacer un frente común contra esta iniciativa, que podría afectar a la principal actividad económica de Canarias en un momento de recuperación y necesaria creación de empleo.
"En primer lugar, los turistas no tienen ninguna obligación de venir a Canarias y si lo hacen es porque el Archipiélago, aparte de sus condiciones inmejorables (clima, profesionalidad, etc.), es un destino europeo y seguro". Al respecto, las patronales recuerdan que casi un 70% de los turistas que vienen a las Islas lo hacen a través de turoperadores y estos ganan más dinero en otros destinos que en Canarias con menores costes operativos, por lo que "encarecer artificialmente el paquete turístico a Canarias no va a gustar en absoluto ni a los turoperadores ni a los clientes. Pensar que esta situación de bonanza turística experimentada desde 2011 se va a mantener ‘sine die’ es desconocer lo más esencial del funcionamiento del sector turístico", señalan.
Por otra parte, ciudades como Barcelona, París, Londres o Nueva York son en sí mismas un reclamo turístico y la gente está dispuesta a asumir unos precios de hotel elevados, tasa incluida. Sin embargo, destinos vacacionales con playas y buen tiempo hay en muchos sitios, no solo en Canarias, por lo que es importante no confundir a la opinión pública con este tipo de comparativas engañosas.
El documento completo elaborado por las patronales puede leerse en la web de Ashotel, haciendo clic aquí.