Este estudio, elaborado en colaboración con el Departamento de Turismo de la Universidad Nebrija, establece siete pautas que todo el mundo sigue a la hora de planificar sus escapadas.
La primera variable es la nota que haya recibido la casa en cuestión, y dado que los establecimientos rurales de nuestro país tienen una nota sobresaliente en general, con una media de 4,41 sobre 5, este aspecto se reparte entre todos.
Por encima del resto, sobresalen los alojamientos canarios, que reciben la nota máxima. Les siguen los de La Rioja (4,87), Andalucía (4,67), País Vasco (4,58) y Extremadura (4,57). Mientras las comunidades autónomas con establecimientos peor valorados, aunque con aprobado, son Castilla-La Mancha (3,95), Comunidad de Madrid (4,11) y Cataluña (4,22).
El trato gana clientes
En cuanto al servicio, se destaca el trato, uno de los valores diferenciales del turismo rural: con 4,4 puntos es lo que mejor opinión genera entre los viajeros rurales, seguido de la limpieza (4,38), la situación (4,36), el confort (4,30), la relación calidad/precio (4,25) y las instalaciones/servicios (4,24).