La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) considera que, a pesar de los "importantes esfuerzos" destinados a mejorar la red ferroviaria, "no se ha conseguido incrementar de forma sustancial la cuota del ferrocarril respecto a otros modos de transporte". Por ello, en su informe sobre el Anteproyecto de Ley del Sector Ferroviario (APL), que sustituye la actual ley de 2003, insta al Gobierno a cambiar el modelo de explotación de las infraestructuras, incentivando "el uso más eficiente de las mismas".
A juicio de la CNMC, el anteproyecto mejora la ley en aspectos relevantes de la regulación del sector ferroviario. Por ejemplo, valora positivamente la simplificación de "la estructura de cánones, dado que elimina el canon de acceso y unifica los cánones de circulación y tráfico, así como la creación de un sistema de licitación de autorizaciones por parte del Ministerio de Fomento para los servicios sujetos a obligaciones de servicio público ajustado a los principios de publicidad, transparencia y no discriminación". También muestra su satisfacción por el incremento de la transparencia financiera y contable de los gestores de infraestructuras, además de por a participación del sector en la planificación de las infraestructuras.
Evitar que se repita la experiencia del transporte de mercancías
Pese a todo ello, la CNMC considera que el anteproyecto "debería ser más ambicioso" para conseguir una apertura efectiva del transporte ferroviario de pasajeros. De esta forma, entiende que "se podría evitar que se repita la experiencia del transporte de mercancías, donde los efectos de la liberalización han sido limitados".
En consecuencia, considera necesario establecer un marco regulatorio que favorezca la competencia. "Esto evitará que Renfe Operadora pueda llevar a cabo comportamientos que obstaculicen la entrada de potenciales competidores", explica. Además, aboga por la modificación de la estrategia de liberalización del transporte de viajeros, mediante un plan de actuación que marque la introducción de competencia progresiva de líneas y corredores, con criterios, hitos, fechas y ámbitos geográficos.
También considera "esencial el diseño de un marco institucional que asegure que el regulador independiente cuenta con las funciones adecuadas para supervisar las obligaciones tanto de los gestores de infraestructuras como de Renfe". Finalmente, apunta que "son necesarias algunas modificaciones en el Anteproyecto para asegurar una correcta transposición de la Directiva 2012/34/UE en relación con las funciones del regulador independiente".