Iberia logra dar la vuelta a sus resultados gracias a las medidas recogidas en su plan de transformación, entre las que destacan la eliminación de las rutas no rentables y la reducción de su base de costes. La aerolínea, que ha dado a conocer su plan de futuro coincidiendo con el día del inversor, avanza que cerrará 2014 con un resultado positivo, dejando atrás seis años seguidos de pérdidas.
A pesar de haber vuelto a registrar números negros, Iberia seguirá adelante con su reestructuración mediante un plan de futuro que gira en torno a cinco ejes y contempla un total de 30 iniciativas. Éste incidirá en conseguir una base sólida de ingresos, una mayor flexibilidad y unos costes más competitivos. Asimismo, buscará nuevas vías de ingresos complementarios. Gracias a esta estrategia la compañía aérea prevé generar anualmente entre 200 y 300 millones de euros de caja en el periodo comprendido entre 2017 y 2020.
Han abandonado la empresa 3.800 trabajadores
En términos de empleo, la aerolínea sigue adelante con el objetivo inicial de reducir en un 25% su plantilla, que en 2012 superaba los 20.000 trabajadores. Para el cierre de este año prevé que un 70% (3.803) de los 5.471 empleados afectados por este plan de reestructuración ya hayan abandonado el grupo, mientras que entre 2015 y 2017 lo harán los 1.668 restantes.
En una entrevista concedida a NEXOTUR este verano, el presidente ejecutivo de Iberia, Luis Gallego, ya avanzó que "estamos en un proceso de transformación donde todavía queda mucho por hacer". Si bien aclaró que "cada paso que damos va en la dirección correcta". "Además de la mejora de los costes laborales, estamos trabajando en la reducción del resto de costes y en el incremento de los ingresos mediante iniciativas como la mejor gestión de ingresos, un nuevo producto de largo radio, una nueva imagen de marca y la mejora de la experiencia cliente en todos los puntos de contacto", explicaba.