-Por un lado, dar un servicio a una tercera edad con problemas económicos y pocas posibilidades para viajar. Una tercera edad de la postguerra que en su juventud no pudieron disfrutar del mundo de las vacaciones y de los viajes.
-Por otro lado, ayudar a los hoteleros, abocados al cierre en temporada baja. De esta forma, dando un precio “político”, se podían ofrecer unos servicios hoteleros que permitirían mantener el establecimiento abierto, y con ello, mantener el personal y reducir los costes de baja de luz, así como dar vida a poblaciones, etc.
-En tercer lugar, conseguir una entrada de reservas (con una bajísima rentabilidad) para las agencias de viaje, consiguiendo con ello poder atraer a una clientela más familiar.
En 30 años las cosas han cambiado sustancialmente. El Imserso se convirtió en un gran negocio para la empresa que lo pudo explotar durante años, pues en este sistema nos encontramos una baja contratación con un plan de ayudas del Gobierno.
Pero el Imserso se ha convertido también en una “necesidad“ para la tercera edad. Tercera edad que en muchos de los casos dispone ya de un poder adquisitivo capaz de afrontar viajes similares.
En la anterior convocatoria de Imserso hubo una demora en la adjudicación por intereses de las empresas presentadas, pero a su vez hubo un dato curioso: Una de estas empresas realizó, al margen de su propuesta, una alternativa de viajes con precios igualmente competitivos
Ante esta situación, la pregunta que está en el aire es: ¿Tiene lógica este sistema de adjudicación de viajes a dos o tres empresas que se presentan en función a una inversión de booking, etc?
El mercado, por suerte, ha evolucionado, y en estos momentos estas situaciones hoteleras han evolucionado, así como varios turoperadores que están lanzando propuestas muy sugerentes.
DIT Gestión defiende esa libertad de oferta, libertad que afecta directa y positivamente al pensionista, ya que de esta manera la oferta de destinos se ve claramente ampliada.
Entre las muchas opciones alternativas posibles se encuentra, por ejemplo, la posibilidad de ofertar un tipo de “bono” para que el pensionista elija entre un abanico de viajes que puedan adaptarse a él. Dit Gestión apoya aquellas propuestas provenientes del sector turoperación, o bien propias.
Nos encontramos en un momento de cambio, en el mercado, en muchos aspectos:
- Conocimiento de destinos por parte de pensionistas.
-Mayor oferta de servicios por parte de turoperadores.
-Posibilidades de hoteleros.
-Incremento de los grupos de gestión.
Nos encontramos en el cambio de un ciclo, (al igual que otros ya realizados), que debe desencadenar en un nuevo planteamiento del plan de ayudas a pensionistas, con mayor implicación de todas las partes. En concreto desde Dit Gestión se cree que el sistema de adjudicación a dos o tres empresas ha quedado obsoleto, y que lo único que se consigue son ganancias de dichas agrupaciones.