El estudio de la fundación demuestra un "menor pesimismo" por parte de los empresarios en comparación con el año pasado y una "situación de incertidumbre", puesto que las previsiones determinan que mejorará la ocupación pero "no queda claro cómo se comportarán otras variables como el número de estancias o el gasto por turista".
Además, la Fundación Gadeso ha precisado que, por tipología de alojamiento, los más optimistas son los empresarios de hoteles convencionales, ya que el 14,3% cree que será mejor esta temporada. A continuación aparecen los apartamentos turísticos, con un 12% de opiniones "positivas", el Turismo residencial con un 11,5% y el Turismo rural con un 9,3%.
Estacionalidad y escasa competitividad del producto
El estudio hace referencia tambíén a los principales problemas de la actividad turística balear: la estacionalidad y la "escasa" competitividad del producto de las islas. Según el informe, Baleares "no puede competir en precios", lo que hace necesario "poner en valor otros aspectos que estimulen tanto a mercados genéricos como a segmentos más concretos".
Finalmente, casi tres de cada cuatro hoteleros opina que no se mantendrán los puestos de trabajo ya existentes, un dato que es "todavía peor" en Menorca y que, según Gadeso, "puede afectar a los trabajadores fijos discontinuos".