El atentado del pasado 12 de enero en el barrio turístico de Sultanahmet (Estambul), que costó la vida a al menos diez turistas,
supuso un fuerte impacto en la demanda turística en los días siguientes. Un estudio de ForwardKeys,
basado en el análisis de 14 millones de operaciones, concluye que en la semana posterior a la explosión las reservas para viajar a esta ciudad sufrieron un
retroceso interanual del 32%.
Italia y Alemania son los países donde más se contrajo la demanda tras el atentado
La mayor caída corresponde al mercado emisor italiano (-50%), mientras que Alemania, país de procedencia de los turistas fallecidos, también experimentó un gran descenso del 39%. Reaccionaron de forma muy similar los viajeros de la gran mayoría de potencias emisoras. Por ejemplo, las contrataciones de viajes efectuadas en Estados Unidos, Reino Unido y Francia registraron caídas del 36%, 34% y 39%, respectivamente.
Ucrania protagonizó un fuerte aumento
Tan solo Argelia, Kuwait, Arabia Saudí y Ucrania emitieron en los días posteriores al atentado más turistas que en las mismas fechas del año anterior. Mientras que los tres primeros muestran crecimientos que oscilan entre el 3% y el 13%, llama la atención el significativo avance del 44% protagonizado por el mercado ucraniano.
El consejero delegado de ForwardKeys, Olivier Jäger, explica que "se puede ver una reacción directa al atentado". Sin embargo, apunta que "
las consecuencias para Estambul no son tan fuertes como las que sufrió París tras los ataques del 13 de noviembre". Pese a ello, reconoce que "el panorama no es prometedor" porque "diez de sus principales mercados emisores se encuentran por debajo del año pasado".