El Centro de Investigación y Control de la Calidad del Instituto Nacional del Consumo analizará muestras tanto de alimentos como de productos no alimenticios en Paradores. El objetivo de este acuerdo es "ofrecer un producto turístico de calidad que sea imagen de la hostelería española a nivel internacional e instrumento de la política turística del Estado", según manifiesta el Ministerio de Sanidad y Consumo en un comunicado.
Bajo el proyecto se analizarán unas 150 muestras al año que incluyen, en el campo de la alimentación, carnes y pescados, además de verduras y otros productos destinados al consumo, así como otros no alimenticios como la lencería de comedor y habitaciones, celulosas, productos de limpieza, colchonería o almohadas, entre otros.
