La gestión actual corre a cargo de Starwood, que se hizo cargo del inmueble tras la absorción de las antiguas arrendatarias. Según el Consistorio, la futura entidad contará con un contrato por "veinte o treinta años" y deberá invertir en la mejora de las instalaciones durante los dos o tres primeros. El ‘canon’ impuesto pasará a formar parte de los presupuestos municipales y se encontrará en torno al 1% de su facturación. En la actualidad la cantidad abonada por Starwood se sitúa en los 140.000 euros.
Pero estas no son todas las condiciones que exige la administración. Aunque el Pliego de Condiciones se hará público el próximo verano, el delegado de la Presidencia de la entidad local ya ha adelantado que la cadena tendrá que cumplir con otras obligaciones ‘en especie’ como la cesión de salones y habitaciones para la celebración de actos. Además deberá asegurar un flujo de visitantes internacionales de alto poder adquisitivo y contar con una plantilla "acorde" con las exigencias del establecimiento y sus clientes.