La OCU calcula que cerca de la mitad de las compras por Internet están relacionadas con viajes. Por ello, aconseja que cualquier reserva de un producto o servicio turístico "debe contener una información imprescindible, como el precio final (identificando claramente los gastos de gestión), la descripción del viaje y los derechos del cliente".
Al respecto, la organización recomienda que quien reserve su viaje en la Red se asegure de tener un contrato escrito que recoja detalladamente todos los extremos. Asimismo, destaca la importancia de que el viajero conserve toda la documentación que le pueda servir para hacer valer sus derechos en caso de que se planteen problemas.