Según explica, la pasada temporada invernal "tuvo unos inicios muy difíciles debido al mal tiempo", aunque a partir de Navidad "la actividad comenzó a remontar". Por zonas, Cataluña y Aragón son "las que menos oscilaciones han sufrido", mientras que Andalucía "inició muy mal el año", compensado posteriormente "por una mejora espectacular del número de visitantes". El resto de cordilleras "han bajado bastante respecto al año pasado", apunta Bisbe.
De cara al futuro, Atudem, que representa al 80% de las estaciones españolas, resalta la importancia de emprender iniciativas a largo plazo para promocionar el esquí. Asimismo, su presidente reconoce que si finalmente Jaca o Barcelona organizan los Juegos Olímpicos de Invierno 2022, se producirá "un cambio brutal" en materia de infraestructuras, "por lo que habría que intentar que todo el sector se aproveche de esta oportunidad".
Durante la temporada de verano las estaciones de esquí continuarán abiertas. De este modo, se pretenden sustituir los deportes de nieve por una oferta de actividades de ocio vinculadas a la naturaleza y al deporte de aventura.