Los establecimientos del grupo rinden un singular homenaje al arte del buen comer en sus espacios gastronómicos
Además de sus equipadas comodidades, si algo comparten todos ellos es su particular oda a la gastronomía, que se materializa en sus espacios culinarios partiendo de una filosofía de cocina propia que engloba el concepto #GastroSilken. Del Restaurante Carmen del Hotel Silken Al-Ándalus al Restaurante Vitoria, en el Hotel Silken Ciudad de Vitoria, son rincones únicos que rinden culto al placer del buen comer.
Tampoco faltan especialidades de la cocina local. Así, el Gastrobar SOOK del Hotel Silken Atlántida, en Santa Cruz de Tenerife, permite disfrutar de auténticas recetas canarias, eso sí, con una fusión ganadora entre lo tradicional y la vanguardia. En el Restaurante Etxaniz del Hotel Silken Indautxu, en Bilbao, también son expertos en transmitir los sabores de la gastronomía vasca a través de propuestas culinarias muy originales.
Por otro lado, con el objetivo de enamorar a todos los paladares, los espacios culinarios de Hoteles Silken dan una importancia especial a la cocina de mercado. Es el caso del RooM87, en el Hotel Silken Juan de Austria de Valladolid. Asimismo, La Tramoya, en el Hotel Silken Gran Teatro de Burgos, ofrece recetas de corte moderno y creaciones de un chef especializado en este tipo de gastronomía. Por último, sentarse a comer en el restaurante del Hotel Silken Puerta Valenciano implica disfrutrar de una cocina de mercado creativa.
La importancia del buen maridaje
Saber combinar los bocados más exquisitos con una copa de vino es un arte que mejora la experiencia gastronómica del comensal. Conscientes de ello, Las Médulas, el restaurante del Hotel Silken Luis de León situado en la capital leonesa, sirve la mejor cocina de la zona acompañada de un buen caldo con denominación de origen. Por otro lado, la variedad y frescura son los ingredientes principales del menú del restaurante Turieto, en el Hotel Silken Ordesa.