Su historia es la de muchos deportistas que sobreviven sin un balón en los pies, porque han elegido una disciplina en la que no tienen a cientos de seguidores a sus espaldas, por lo que deben sobrevivir de sus propios ingresos para competir e incluso para lograr medallas en las competiciones.
Hace tan solo dos semanas, Miguel Ángel se enfrentaba al problema de no tener recursos para competir en las dos pruebas que tenía por delante: los Campeonatos de España y Andalucía de Tiro con Arco con Poleas, a los que tenía que rehusar por falta de recursos para desplazarse.
Tras plantearse su retirada, decidió acudir a un medio de comunicación para contar su historia y la respuesta fue superior a lo que esperaba: "En menos de 48 horas ya tenía patrocinadores y los apoyos para poder competir con garantías", explica Miguel Ángel.