El número de pasajeros transportados por la aerolínea pasa de 21,3 millones entre abril y junio de 2011 a 22,5 millones en este año, lo que supone un crecimiento del 11%. Ryanair atribuye la caída del beneficio a los mayores costes de combustible, que acaparan ya el 47% de los gastos totales, aunque prevé que esta repercusión se verá reducida en los próximos tres meses.
"El aumento del rendimiento se ha visto atenuado por la recesión que atraviesa la Unión Europea, junto a las medidas de austeridad", destaca su consejero delegado, Michael O'Leary. Por otro lado, la compañía aérea hace referencia a la subida de las tasas en España, insistiendo en que estos incrementos impositivos perjudicarán al Turismo español y al empleo del país.