La nueva compañía aérea, Thomas Cook Airlines Balearics,
comenzará a operar a principios de 2018 y forma parte de los planes de crecimiento de Thomas Cook Airlines. Mallorca, la nueva base europea, es el destino más solicitado y desde donde la aerolínea podrá proporcionar vuelos de apoyo a las demás filiales de la división en función de la demanda estacional. Adicionalmente, ofrecerá una mayor flexibilidad operativa al mismo tiempo que permitirá mantener un control más inmediato sobre la calidad y la experiencia del cliente. La nueva línea aérea iniciará operaciones con
un mínimo de tres a siete Airbus A320, que anteriormente operaban para Thomas Cook Airlines Bélgica.
Será la plataforma perfecta para equilibrar la demanda estacional
El jefe de la división aérea de Thomas Cook, Christoph Debus, destaca que la nueva filial "será la plataforma perfecta para equilibrar la demanda estacional, operar a un menor costo y proporcionar a los clientes una mayor gama de destinos a la vez que aumentamos el negocio aéreo". "
Con más de un millón de clientes de Thomas Cook que vuelan a Palma cada año, aprovecharemos para desarrollar y potenciar la amplia infraestructura existente de la compañía", añade. Por su parte, el responsable de Thomas Cook Airlines Balearics y del Certificado de Operador Aéreo, Juan Manuel Gallego, avanza que "creará nuevos puestos de trabajo en Palma de Mallorca para profesionales cualificados en mantenimiento, operaciones de vuelos y funciones de gestión, así como para pilotos y tripulación de cabina".