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ASESTA UN DURO GOLPE A LA INTERMEDIACIÓN

Lufthansa aplicará un recargo de 16 euros a las reservas realizadas por las agencias de viajes a través de GDS

Amadeus critica esta decisión al entender que ‘pone en desventaja a las agencias de viajes y al cliente final’

jueves 04 de junio de 2015, 02:00h

Lufthansa asesta un duro golpe a los GDS. El grupo aéreo aplicará a partir del 1 de septiembre un recargo de 16 euros a las reservas efectuadas a través de estos sistemas. La medida, con la que pretende incrementar el margen de beneficio, "pondrá en desventaja a las agencias y al cliente final", denuncia Amadeus.

El grupo aéreo da un giro a su estrategia comercial para aumentar su rentabilidad.
El grupo aéreo da un giro a su estrategia comercial para aumentar su rentabilidad.

Lufthansa penalizará las reservas efectuadas a través de los sistemas de distribución global (GDS). El grupo aéreo ha anunciado que todas sus marcas (Lufthansa, Austrian Airlines, Brussels Airlines y Swiss) aplicarán un recargo de 16 euros, a partir del 1 de septiembre del presente año, por cada billete emitido por las agencias mediante estas plataformas.

Con esta polémica decisión, que sienta un precedente muy preocupante para los intermediadores turísticos, el grupo persigue aumentar su rentabilidad y conseguir una mayor personalización de la oferta. Según argumenta, el coste de utilizar un GDS es "mucho más elevado que otros métodos de reserva", lo que hace que cada año el grupo deje de ingresar más de 100 millones de euros.

Amadeus lamenta que ‘pondrá en desventaja a las agencias’

A raíz del anuncio, el vicepresidente senior de distribución de Amadeus IT Group, Holger Taubmann, critica que el citado recargo "penaliza a los viajeros dependiendo del canal que utilicen para realizar sus reservas", obligando a los que acudan a las agencias "a pagar más por un mismo servicio". El directivo sostiene que "las agencias se verán forzadas a aceptar una nueva estrategia comercial mediante la cual tendrán que modificar la forma en que acceden al contenido específico de Lufthansa y aumentar el coste en tecnología, lo cual acabará probablemente siendo repercutido en el viajero". "Todo esto, en definitiva, pondrá en desventaja a las agencias de viajes y al cliente final", añade.

Taubmann también sostiene que el nuevo modelo "dificultará la comparación y la transparencia, porque los viajeros estarán obligados a acudir a múltiples canales en búsqueda de las mejores tarifas". "En último término, la industria en su conjunto acabará perdiendo con este nuevo modelo de distribución", prosigue.