El dato más negativo corresponde a 2009, cuando el número de pasajeros cayó un 4,5%. Volviendo a 2013, detrás de la ligera variación positiva está el crecimiento del 2% de los viajeros internacionales, que superan la cifra de 158 millones. En cambio, el tráfico doméstico retrocede un 3,7%, hasta los 22,6 millones de pasajeros (900.000 menos que hace un año).
Desde 1990, únicamente en dos años el número de pasajeros en rutas domésticas se ha comportado peor. En 2009 experimentó un retroceso de 1,1 millones, mientras que en 2001 fue de 1,2 millones.