Las principales aerolíneas europeas y fabricantes aeronáuticos se han unido para pedir que se solucione el conflicto con China y otros países tras la aplicación de la tasa de emisiones de carbono (ETS). Así se lo han hecho saber en una carta enviada a los líderes de España, Mariano Rajoy, Alemania, Angela Merkel, Francia, François Fillon, y Reino Unido, David Cameron.
En la misma han admitido su temor ante posibles "consecuencias contra la aviación europea" y a las "contramedidas" que pudieran tomar países terceros en respuestas a esta nueva normativa. Según explican, "muchos de los países" que se oponen a dicho impuesto ya han llevado a cabo ciertas "restricciones". Por ejemplo, Airbus advierte que China ha cancelado un pedido superior a 9.150 millones de euros, lo que provoca que se esté "poniendo en peligro hasta 1.000 puestos de trabajo, además de otros 1.000 empleos en la cadena de proveedores".
Los consejeros delegados de las nueve empresas firmantes esperan que "la lista de suspensiones, cancelaciones y acciones punitivas" crezcan en otros "grandes mercados" que también se oponen a la ETS. "Es una situación que la actual y debilitada europea no se puede permitir", lamentan.
Por todo ello, reclaman que "con carácter urgente" se realicen consultas en el Consejo Europeo y "sobre todo que se dialogue con los Estados que estén barajando tomar represalias". "Siempre hemos creído que la única manera de resolver el problema de las emisiones de la aviación pasa por una solución global, y ésta solo se puede encontrar dentro de la Organización de Aviación Civil Internacional (ICAO)", explican en la misiva.