Kallas ha expuesto ante los ministros el informe que ha elaborado a petición de la Eurocámara y cuya conclusión es que la utilización de escánares corporales representa un método "fiable y eficaz" para detectar objetos peligrosos. El estudio no ve riesgos graves para la salud o la protección de datos de los pasajeros si se emplean correctamente, aunque aboga por establecer normas comunes en toda la UE que aseguren a los ciudadanos los mismos derechos y garantías. El responsable de Transportes reitera que el uso de escáneres es una "decisión voluntaria", pero defiende que si se recurre a este instrumento "deben seguirse ciertas reglas sobre salud y privacidad".
Por otra parte, los ministros de Transportes de los Estados miembros también han discutido sobre la respuesta de la UE ante el cierre del espacio aéreo por la nube de ceniza procedente del volcán Eyjafjalla. Así, se han comprometido a acelerar el proyecto del ‘cielo único europeo’ para mejorar la gestión del tráfico. "Debemos avanzar en este sentido para armonizar la gestión del tráfico aéreo en la UE, que tiene ventajas sustanciales en comparación con el sistema actual", sentencia Kallas.