El Patronato de Turismo de Lleida ha señalado que las mejores perspectivas son las del Val d'Aran, donde se prevé que la ocupación oscilará entre el 90% y el 100% durante los 13 días de vacaciones (desde Navidad hasta Reyes).
El resto de comarcas pirenaicas leridanas oscilarán entre el 65% y la plena ocupación dependiendo de las zonas y de las fechas. Así, se espera una mayor afluencia de turistas en las fechas próximas a fin de año y menor entre el 4 de enero y la festividad de Reyes.
El esquí será la actividad que marcará las estancias estos días y, según el Patronato, se venderán unos 200.000 forfaits. La oferta turística en las zonas próximas a las estaciones de esquí suma más de 30.000 plazas en diferentes modalidades de alojamiento.
En el Pirineo de Girona la previsión media de reservas oscilará entre el 80% y el 90% entre los días 27 y 31 de diciembre, una cifra que caerá hasta el 55% o 75% durante el Puente de Reyes, según las reservas de última hora.
Mayor importancia del turista extranjero en la Costa Brava
El perfil del turista que acuda a esquiar a estas comarcas gerundenses será básicamente un turista interior, mientras que en la Costa Brava tendrá un importante peso el visitante extranjero (franceses, ingleses, alemanes, italianos y suecos).
Teniendo en cuenta que en comarcas costeras como el Baix Empordà estarán abiertos cuatro de cada diez establecimientos, la ocupación oscilará entre el 40% y el 60%. En el Alt Empordà podrá llegar hasta un 80%, con un turismo familiar entre Navidad y Fin de Año.
Por su parte, la Asociación Hotelera Salou-Cambrils-La Pineda, en la Costa Daurada, prevé una ocupación en torno al 61% de las 6.106 plazas disponibles en Navidad.