La AEA ha recordado que la industria aeronáutica es responsable sólo del 2% de las emisiones de CO2 que se producen en el mundo. Al respecto, el secretario general de la asociación, Ulrich Schulte-Strathaus, afirma que el sector es "consciente de sus responsabilidades ambientales y está plenamente dispuesto a participar" en aquellos programas destinados a controlar el efecto invernadero de la industria, pero recalca que "la contribución de la industria a la solución no puede exceder de su contribución al problema".
La CE considera que incluir a la aviación en este sistema permitiría tener una fuente adicional de financiación para ayudar a los países en desarrollo a luchar contra el cambio climático. El ejecutivo comunitario prevé tratar este tema en la cumbre de Copenhague de diciembre. La AEA considera que no existe "ninguna justificación" para amenazar con sanciones sobre el sector en un momento en el que la propia industria está centrando sus esfuerzos en lograr "un consenso mundial para dar una solución global a un problema que es también global".