miércoles 06 de abril de 2011, 01:00h
Ryanair pretende cobrar de los contribuyentes 60 euros por pasaje por cada asiento de las dos rutas establecidas desde el aeropuerto de Lérida. La heterodoxa compañía irlandesa de vuelos baratos exige, nada menos, que triplicar la subvención con la que la Generalitat de Catalunya alimentaba sus rutas aéreas. Como si de un negocio del hampa se tratara, Ryanair ha reaccionado al no de la Generalitat.