Además, según han afirmado desde el Palacio de Congresos de Girona, el Tren de Alta Velocidad "ayudará a situar la ciudad como destino más viable y atractivo dentro del Sector MICE".
Por el momento se han puesto en funcionamiento ocho frecuencias diarias por sentido entre Figueras y Madrid y nueve entre la capital ampurdanesa y Barcelona. El objetivo es que, a medida que se observe el comportamiento de la demanda, se amplíe el número de servicios. El viaje de Barcelona Sants a Girona tiene una duración de 37 minutos y entre la estación de Atocha de Madrid y Girona, de tres horas y 34 minutos o cuatro horas, según el número de paradas intermedias.
Mejora de las comunicaciones
Con la llegada del tren de alta velocidad en las comarcas gerundenses se completa la conexión en alta velocidad entre todas las capitales catalanas y con el resto del España y se hace posible, finalmente, el enlace con Francia. Este nuevo equipamiento mejora notablemente las comunicaciones de la ciudad —que ya dispone del Aeropuerto Girona Costa Brava— y se entiende como un impulso positivo tanto para el comercio como para el turismo.