Durante la celebración, el equipo de CCI del Hotel Princesa Sofía plasmará con vivencias algunas de estas tradiciones, que serán de gran impacto para los asistentes. Así, la compañía creará momentos muy emocionantes, como el levantamiento de un casteller en pleno hall del hotel, con los graells tocando música tradicional como acompañamiento.
Por otra parte, el equipo comercial se convertirá en ‘guías turísticos’ y utilizarán las vistas del salón Top City, última planta del hotel, para explicar a sus invitados dónde encontrar lugares tan destacados de Barcelona como la Sagrada Familia, Montjuïc o la Torre Agbar, entre otros. Pero además, el hotel creará estaciones tan curiosas como un asador de castañas o un punto para degustar el cremat.
"La experiencia que viven los asistentes en nuestros eventos es lo que marca la diferencia: facilita que nos recuerden de una forma muy grata y que quieran volver que, al final, es lo que más valor aporta a nuestro grupo. En cuantas más vivencias participen los invitados, más quedará la marca grabada en su mente. Podríamos denominarlo posicionamiento experiencial", afirma la directora comercial del grupo, Sonia Blanc.