La CNMC revela que la operación ‘planteaba riesgos’ en tres rutas
Sin embargo, Competencia reconoce que
la operación "planteaba riesgos" en los mercados del transporte marítimo regular en tres rutas: Sur Península-Melilla, Península-Canarias e interinsular canario. Por esta razón, y para lograr la aprobación, Armas ha tenido que presentar ante la CNMC una serie de compromisos. En la primera, la adquisición planteaba problemas para la competencia en los tráficos de pasajeros y de mercancías, dado que desaparecía un competidor relevante. Además, Armas y Trasmediterránea eran los únicos operadores que prestaban el servicio de tráfico marítimo de pasajeros entre la Península y Canarias, por lo que la operación suponía la aparición de un monopolio, que afectaría también al tráfico entre islas (interinsular), ya que Trasmediterránea operaba una ruta circular con escala en determinadas islas.
La CNMC explica que los compromisos presentados por Armas suponen que
la naviera FRS comenzará a operar la ruta Motril-Melilla y la ruta circular Huelva-Canarias de servicios de transporte marítimo de pasajeros y carga. Estas rutas actualmente las opera Armas, por lo que la entrada de FRS solventará los problemas de competencia. En cuanto al tráfico interinsular canario, la propuesta de compromisos asegura la libertad de FRS para que pueda prestar las líneas entre islas que considere oportuno a través de la línea Huelva-Canarias.