La asociación empresarial ha considerado que la posibilidad de que puedan llevarse a cabo obras durante la temporada de verano "traerá consecuencias negativas" a la actividad turística en forma de anulaciones de reservas e indemnizaciones a los turoperadores y clientes.
Así, la ACH se ha mostrado "totalmente en contra" a esta posibilidad y han pedido al Gobierno balear una "revisión urgente" del decreto antes de su aprobación en el Consejo. Además, la asociación hotelera ha solicitado el texto para hacer un "detallado análisis de la norma".
Los hoteleros han manifestado también su descontento por no haber sido consultados y haberse enterado por la prensa" ya que consideran que su opinión es "importante" como Sector interesado.
El Gobierno, dispuesto a corregir el decreto
La portavoz del Gobierno balear, Joana Barceló, ha asegurado que el Ejecutivo está dispuesto a "corregir" el decreto Grimalt para garantizar "aún más" que el ruido de los trabajos no perjudiquen a los turistas durante esta temporada.
Tras la reunión del Consejo de Gobierno, Barceló ha anunciado que el decreto se aprobará esta semana y ha entendido "perfectamente" la preocupación del Sector.










