La malaria, el dengue o la fiebre del zika son algunas de las enfermedades más comunes
El Turismo se encuentra prácticamente recuperado tras su recesión durante la pandemia, algo que es también palpable en los viajes de larga distancia del emisor español. "El mercado emisor español está volviendo a los niveles prepandemia en el largo radio, algo que se puede ver en los países asiáticos e iberoamericanos, donde ahora las aerolíneas están lanzando una gran cantidad de plazas", aseguraba Carlos Cendra, director de comunicación y marketing de Mabrian, durante el pasado mes de marzo.
En este caso, en la búsqueda de experiencias y escapadas paradisíacas, los viajeros españoles han demostrado una creciente predilección por los destinos tropicales ya que estos ofrecen una gran combinación de playas, climas cálidos durante todo el año y una rica oferta cultural. Entre los destinos más populares, se encuentran la República Dominicana, Cuba, México, Tailandia, Maldivas, Indonesia, Costa Rica, Mauricio y Tanzania.
Sin embargo, viajar a estas regiones también conlleva ciertos riesgos para la salud que los viajeros deben considerar. Las enfermedades tropicales, transmitidas principalmente por insectos o por el consumo de agua y alimentos contaminados, son un desafío frecuente en muchas de estas áreas. Las enfermedades más comunes suelen ser, entre otras, la malaria, el dengue, fiebre del zika, la chikunguña, esquistosomiasis, filariasis o la rabia.
Según un estudio coordinado por investigadores de la Estación Biológica de Doñana (CSIC), el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) y el Área de Epidemiología y Salud Pública (CIBERESP) del Centro de Investigación Biomédica en RED, España sigue registrando entre 700 y 850 casos de malaria importada al año. Además, según el Comité Asesor de Vacunas de la AEP, los casos de dengue, zika y chikunguña han aumentado desde el 2022, confirmándose 389 casos de dengue, seis de zika y 82 de chikunguña en 2023.
Ante esta situación, Borja Díaz, consejero delegado de Allianz Partners explica que “las enfermedades tropicales representan un riesgo significativo para los viajeros, especialmente en destinos donde las condiciones sanitarias varían en gran medida con respecto a la sanidad española". Por lo que, es crucial que los turistas se preparen adecuadamente y tomen precauciones para protegerse contra estas infecciones.
Esta prevención, compuesta por una previa información y seguimiento de las medidas recomendadas, debería complementarse con la contratación de un seguro de viaje. "Nuestro objetivo es garantizar que los turistas disfruten de su viaje con la tranquilidad de estar bien protegidos frente a los diferentes riesgos para la salud. Por estas razones, el seguro de viaje cobra especial relevancia, ya que puede cubrir emergencias médicas que protejan frente a posibles eventualidades”, añade Díaz.
Evolución de los seguros
Hace más de un lustro, los seguros de viaje se consideraban un complemento (en muchas ocasiones, prescindible) a la hora de realizar un viaje. Sin embargo, tras la pandemia, este pensamiento ha cambiado y la seguridad es ahora prioritaria para el turista. Retrasos aéreos, urgencias médicas, fenómenos atmosféricos o retornos anticipados son sólo algunos de los motivos que pasan por su cabeza para contratar este tipo de servicios y es que muchos buscan tener una cobertura prácticamente completa, hasta el punto de que existen seguros que cubren anulaciones por cualquier motivo, incluyendo el libre desistimiento.
Según un informe de AXA Partners, el 56% de los españoles que viajan al extranjero se protege con un seguro de viaje, tal y como corroboran sus datos de los dos últimos años. Además, tras su contratación y uso, el índice de satisfacción es notablemente alto: el 75% de los encuestados que viajaron con un seguro afirman que lo volverán a contratar. "El precio de un seguro apenas supone entre el 2 y el 5% del coste del viaje, frente a unas coberturas muy extensas", señala Andreas Friedrich, director de operaciones de AXA Partners.