"Esta certificación representa que estamos haciendo las cosas bien, que tenemos un orden, un control y unos objetivos y directrices a seguir", comenta el director de la Oficina de Congresos, Ramón Palazón. Fue en marzo de 2006 cuando la entidad que dirige Palazón consiguió la ‘Q’ de Calidad por primera vez y, tras obtener una primera renovación de la certificación, en esta ocasión se han vuelto a revisar todos y cada uno de los elementos evaluables en la norma.
Dirección, información, administración y comercialización han sido las cuatro líneas fundamentales por las que los responsables de evaluar a la Oficina de Congresos han dirigido sus exámenes. El resultado final ha sido la obtención de una media de siete sobre diez. Esto repercute directamente en el cliente y, también, en la forma de trabajar de la Oficina. "Si ponemos un orden y un control en mi casa, al final siempre va a repercutir en beneficio del cliente", manifiesta Ramón Palazón.
Asimismo, como compromiso con la excelencia y la mejora continuada de los servicios que presta la Oficina de Congresos, dispone de dos manuales en los que se plasma cómo debe actuar una empresa y la filosofía del trabajo que debe aplicar, en referencia también a las empresas que tiene asociadas.
Internacionalización de la calidad
Por otro lado, la Oficina de Congresos de Murcia se encuentra en vías de entrar a certificar la calidad de la entidad con normas internacionales con el objetivo de seguir perfeccionando los servicios que ofrece. "Estamos valorando la posibilidad de certificar la Oficina en 2008 con un norma ISO para tener también un reconocimiento europeo", afirma Palazón.
Además, en relación al Decreto aprobado por la Región de Murcia que regula la actividad de los organizadores profesionales de congresos (OPC), Ramón Palazón se muestra bastante satisfecho, ya que beneficia tanto al cliente como a los propios organizadores. "Durante muchos años ha habido mucho intrusismo y con el Decreto se da un paso muy importante para luchar contra esta situación".










