La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha publicado una investigación que muestra que el deseo de viajar de los ciudadanos se está viendo afectado por el riesgo a contraer el Covid-19. Dentro del aeropuerto, el 59% ha indicado que su principal preocupación es que el medio de transporte de camino al avión está abarrotado. Igualmente, un 42% asegura que su principal miedo son las colas en el check-in. Por su parte, el 38% no se fía del uso de servicios sanitarios, como los baños del aeropuerto. Del mismo modo, en el avión, el 65% tiene miedo de sentarse al lado de alguien que podría estar infectado; el 42% ve el riesgo en el uso del baño, y el 37% en el aire del avión.
El 37% de los encuestados desearía realizar la prueba PCR en los aeropuertos de salida
En este sentido, el CEO de IATA, Alexandre de Juniac, ha apuntado que los pasajeros «deben estar tranquilos por las numerosas medidas antivirus incorporadas en el sistema de flujo aéreo y la disposición de los asientos orientados hacia adelante». Además, ha explicado que «la detección antes del vuelo y las coberturas faciales son algunas de las soluciones adicionales de protección que está aplicando el sector y los gobiernos por recomendación de la OACI y la Organización Mundial de la Salud». «Ningún entorno está libre de riesgos, pero pocos entornos están tan controlados como la cabina de la aeronave», añade.
Por otra parte, en el bloque de la encuesta en el que se les pidió que clasificaran las tres medidas principales que los harían sentir más seguros, el 37% citó la prueba PCR en los aeropuertos de salida; el 34% estuvo de acuerdo con el uso obligatorio de máscarillas faciales; y el 33% señaló medidas de distanciamiento social en los aviones. A este respecto, De Juniac destaca que «para tener el máximo efecto, es fundamental que los gobiernos implementen estas medidas a nivel mundial».
ACI y IATA piden que se paguen las medidas de salud pública
Por otro lado, el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI) World e IATA han instado a que los costos relacionados con las medidas de salud pública destinadas a mitigar la propagación de las enfermedades sean sufragados por los gobiernos. Consideran que deben respetarse las funciones y responsabilidades actuales de los gobiernos, las líneas aéreas, los aeropuertos y otras partes interesadas en las operaciones a la hora de poner en práctica la respuesta al brote de Covid-19.
«Hemos trabajado con éxito con la OACI y muchos gobiernos de todo el mundo para establecer protocolos normalizados que salvaguarden la salud pública y den a los viajeros la confianza necesaria para volver a los cielos, pero la industria sigue al borde de un precipicio financiero», subraya el presidente de IATA. En esta línea, señala que ahora les toca actuar a los gobiernos, para permitir a la industria «concentrar los escasos recursos en reconectar el mundo e impulsar la recuperación económica».
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