International Airlines Group (IAG) tiene vía libre para adquirir Aer Lingus. Pocos días después de que Ryanair aprobase la venta de su participación del 30%, la Comisión Europea ha dado el visto bueno a la operación, si bien está condicionada al cumplimiento de los compromisos ofrecidos por las partes para disipar las dudas planteadas por Bruselas.
A Bruselas le preocupaba que la entidad fusionada careciese de suficiente competencia en varias rutas. Asimismo, concluyó que la operación podría impedir que Aer Lingus siguiera ofreciendo vuelos de conexión con vuelos de largo recorrido de compañías aéreas competidoras en varias rutas.
La decisión de autorización está supeditada al cumplimiento de varios compromisos, como la liberación de cinco pares de franjas horarias diarias en el aeropuerto de Londres-Gatwick para facilitar la entrada de compañías aéreas competidoras en las rutas entre Londres-Dublín y Londres-Belfast. Por otra parte, Aer Lingus seguirá transportando pasajeros en vuelos de conexión con vuelos de largo recorrido de aerolíneas competidoras desde Londres-Heathrow, Londres-Gatwick, Manchester, Ámsterdam, Shannon y Dublín.
La comisaria europea de Política de Competencia, Margrethe Vestager, explica que "al obtener importantes concesiones, la Comisión ha garantizado que los pasajeros de transporte aéreo seguirán pudiendo escoger entre aerolíneas con precios competitivos tras la adquisición de Aer Lingus por IAG". "Los cinco millones de pasajeros que viajan cada año de Dublín y Belfast a Londres podrán elegir entre varias compañías sólidas", señala. Además, asegura que "protegemos a los pasajeros que viajan en vuelos de conexión entre Irlanda y el resto del mundo.