La Barcelona Bridal Fashion Week 2025 ha cerrado sus puertas consolidándose como la edición más ambiciosa y global de su historia. Con cerca de 450 marcas —el 82% internacionales— y 44 diseñadores en pasarela, el evento ha reafirmado el liderazgo mundial de Barcelona en la industria de la moda nupcial y de ceremonia, y ha demostrado nuevamente su fortaleza como destino de referencia para el turismo MICE.
El 76% de los visitantes han sido internacionales
Organizado por Fira de Barcelona con el apoyo del Departament d’Empresa i Treball de la Generalitat, el evento ha reunido a más de 23.500 visitantes, de los cuales un 76% han sido internacionales, procedentes de 82 países estratégicos como EE.UU., Japón, Corea del Sur o Latinoamérica. Este perfil de asistentes —compradores profesionales con alta capacidad de decisión— refleja el impacto económico y la proyección internacional que genera un evento de estas características en el tejido empresarial y turístico de la ciudad.
Por primera vez, los desfiles se han celebrado en el Palacio 8 de Montjuïc, ampliando la superficie expositiva y elevando el nivel logístico y escénico del encuentro. A ello se ha sumado una programación de alto valor experiencial con citas como la Barcelona Bridal Night, protagonizada por Vivienne Westwood, o la entrega de los Barcelona Bridal & Fashion Awards, que han reforzado el componente aspiracional y de marca ciudad de esta convocatoria.
Albasarí Caro, directora del evento, ha subrayado que esta edición ha supuesto “el encuentro real de la élite del sector”, posicionando a Barcelona como “la cita imprescindible de la moda bridal a nivel global”. Más allá del sector textil, este posicionamiento convierte a la ciudad en un polo de atracción internacional también para promotores, organizadores y marcas que operan en el ámbito del turismo de ferias y congresos.
La Barcelona Bridal Fashion Week no solo impulsa el negocio del sector moda, sino que proyecta una imagen de ciudad moderna, bien conectada, creativa y capaz de acoger eventos internacionales de alto valor añadido, consolidando el papel de Barcelona como uno de los destinos MICE más competitivos de Europa.