El estilo ibicenco de Can Prats se palpa a primera vista con una arquitectura que recuerda al visitante el lugar en el que se encuentra: Ibiza. Ese blanco impoluto de su fachada no difiere mucho con la decoración del interior, en la que predominan los tonos neutros y los materiales naturales. El resultado es una villa confortable en la que no falta ningún detalle y en la que lo tradicional se da la mano con los toques más actuales.
Dispone de dos amplias habitaciones y baños completos, un salón y dos comedores, tanto interior como exterior
Can Prats, con capacidad para cuatro personas, dispone de dos amplias habitaciones y baños completos, un salón y dos comedores, tanto interior como exterior. También se puede disfrutar en esta villa de los espacios al aire libre, en los que destacan una pérgola y un jardín con densa vegetación, desde el que se puede disfrutar de las puestas de sol. De esta forma, se adapta a cualquier tipo de usuarios, desde familias con hijos, parejas, grupos de amigos o en solitario.
Todo esto sin renunciar a los habituales servicios de Can Lluc, ya que Can Prats está situada a escasos 150 metros de la piscina del hotel, de la zona de desayuno y de los servicios wellness para la salud física y mental, unos servicios que están incluidos para los clientes que decidan alojarse en esta nueva villa.
De esta forma, el agroturismo dispone de 20 habitaciones, además de la villa Can Jaume Curt a la que se une ahora Can Prats. Can Lluc Boutique Country Hotel & Villas cuenta con la mejor oferta rural de la isla, con una ubicación intimista, pero a menos de 10 kilómetros del centro de la ciudad de Ibiza y muy cerca de localizaciones como Santa Gertrudis, San Lorenzo, o el mercadillo hippy de Las Dalias.