Se trata de uno de los porcentajes más elevado de las cadenas hoteleras en España. La clientela extranjera está compuesta por el 50,4% de huéspedes que son europeos, el 34,8% americanos y el 14,7% asiáticos. Por nacionalidades europeas, los ingleses representan el 27,7% del total del Viejo continente, los italianos el 21%, los alemanes el 13,9%, los franceses el 12,1% y el resto el 28,3%.
Estos clientes internacionales son menos estacionales que los nacionales. Por ejemplo, los millones de turistas extranjeros de carácter individual, que suelen viajar sin niños, reparten más sus vacaciones durante todo el año y no las concentran en verano. Este cliente también permanece más noches en el hotel. Una media de cuatro noches, según los datos de Best Western España.
Asimismo, el precio medio por pernoctación en Best Western en España se situó en 110 euros en 2006, el más alto dentro de la banda del mercado en que se posiciona, según la cadena.